Ser precavidos con el parabrisas y las lunas del coche
Cuando se trata de cuidados para el coche, son muchos los que se centran en atender la parte mecánica y dejan un poco de lado otros aspectos como el estado de la carrocería y los cristales. Quizás para algunos sea obvio que el parabrisas y las lunas son parte importante para la visibilidad, por lo que una alteración en ellos puede repercutir en la seguridad de los ocupantes del vehículo y la de las demás personas.
Con frecuencia al conducir detrás de un vehículo pesado, este lanza pequeñas piedras al ser pisadas por sus neumáticos traseros, lo que es un problema puesto que pueden impactar en el parabrisas y en las lunas si no se mantiene la distancia de seguridad. En ocasiones, esas imperfecciones no son perceptibles a simple vista, sin embargo, pueden abrirse por completo al pasar fuertemente por un bache o si se da un cambio brusco de temperatura, como al utilizar el aire acondicionado en verano.
¿Cómo resolver un problema con las lunas del coche?
Tal vez sea posible reparar, pero no siempre es así. Muchos se alarman cuando deben reemplazar el parabrisas o las lunas porque suponen que habrá contratiempos con las filtraciones; mientras la sustitución se realice en un taller autorizado y localice la pieza en un lugar confiable, no hay que enfrentar riesgo alguno. Para localizar la pieza que requiera solo tiene que ir aquí, en donde encontrará una central de desguaces conformada por empresas certificadas y de prestigio.
La prevención como mejor solución
El parabrisas y las lunas requieren tanto cuido como cualquier otra pieza del coche. Con el pasar del tiempo se van acumulando en ellos todo tipo de suciedad, como el polvo, cenizas, además de las gracias de los pájaros; en fin todo eso puede obstaculizar la visión. Aunque parezca exagerado son muchas las cosas que producen diferentes efectos que distorsionan la vista, por ejemplo hasta el polen es capaz de crear sombras y hacer que el vidrio luzca turbio.
Es común pensar que con pasar por un túnel de lavado se acabará el inconveniente, no obstante, hay suciedades que no se desprenden fácilmente y requieren de una limpieza más profunda. En el mercado hay diversos productos que son muy efectivos, solo debe asegurarse de seguir bien las instrucciones; en el caso de los trucos que se consiguen por Internet, es necesario ser muy cuidadosos, a veces son efectivos, pero afectan el aspecto del cristal.